AUTOBIOGRAFÍA Anderson Javier Florez García.

AUTOBIOGRAFÍA.

Mi nombre es Anderson Javier Florez Garcia, y nací el 24 de diciembre de 1998 en San José de Cúcuta, capital del departamento Norte de Santander (Colombia). Soy el tercer hijo de una familia conformada de cinco integrantes. Mi difunto padre fue conocido en vida como Gregorio Antonio Florez Veloza y esbozó la idea de llamarme Hans, pero mi Madre, Elizabeth Garcia Correa, decidió que mi sustantivo sería otro.

Mis hermanos mayores son Diego Armando Florez Garcia, de 30 años, y Jéssica Paola Florez Garcia, de 26 años. Ambos estudiaron servicios farmaceúticos y esperaban que yo hiciera lo mismo, sin embargo rompí con esa tradicion al elegir una carrera diferente. ¿Pero qué fue lo que me trajo a este momento, a este lugar, a este capítulo de mi vida? Pues empezaré diciendo que cuando era un niño de cinco o seis años más o menos, fui criado en una mida a causa de que mi papá era minero y mi mamá era la cocinera de la mina. Así que tuve que distraerme de alguna forma para evitar aburrirme, por eso creé amigos imaginarios, y aunque no tenía juguetes, me divertía con palitos y piedras que encontraba. Asimismo, en las noches me reunía junto a los mineros quienes narraban historias de terror, de fantasía y de ficción, y esto fue cultivando mi mente, creando en ella un amor desmesurado por crear historias.

En el colegio escribía cuentos, muy malos, demasiados simples, sin estructura ni lógica, mejor dicho, horribles en todo el sentido de la palabra. No obstante, tras la muerte de mi padre a mis trece años, sentí la necesidad de distraerme aun más, ya no solo del aburrimiento, sino también del dolor, de la agonía de saber que una explosión había acabado con sus sueños. Acto seguido comencé mi primera historia oficial, que sí tenía lógica pero contaba con el infortunio de que mi falta de experiencia hizo que cometiera varios errores gramaticales.

Durante un tiempo me encerré en un mundo de palabras. No leía debido a que jamás se me inculcó ese hábito, pero disfrutaba escribir constantemente, lo disfrutaba y lo disfruto sin duda alguna. Afortunadamente pude superar la pérdida y volví a generar lazos de amistad. Después, cuando cumplí los dieciseis años, le pregunté a una profesora de matemáticas cómo saber qué hacer en mi vida, a lo cual contestó -“Si usted tiene algo que le apaciona, escoja una cosa que le ayude a mejorar en eso”- y eso hice. Ingresé a la Universidad de Pamplona en la carrera de Licenciatura en Lengua Castellana y Comunicacion, y gracias a esa decisió a los cuatro semestres publiqué mi primera novela de ciencia ficción. Que no es muy buena, pero es un comienzo. Y ahora, que he ganado aun más experiencia, pienso publicar mi segundo libro a finales del 2018.

Me gusta estudiar, viajar, escribir, leer, enseñar, jugar, avanzar, conocer, triunfar y ser humano. Y mi sueño es ser el mejor escritor de la ciencia ficción del planeta. Voy a conseguir que el mundo entero sepa de mí y que de mis obras se nutra una generación exitosa, que desee amar los libros tanto como yo lo hago. En Dios padre, sé que lo haré.